La investigación y el desarrollo de tecnologías más limpias y eficientes por parte del CPTS es el resultado del trabajo y experiencia acumulada por varios años en empresas de distintos rubros. Esto ha permitido conocer de primera mano las dificultades y limitaciones que enfrentan las empresas, especialmente las PyMEs, en relación a las características de la base tecnológica con la que cuentan. Es común que las empresas de mediano y pequeño porte enfrenten problemas que van desde el mal dimensionamiento, la mala calidad e inadecuada instalación, hasta la ausencia de tecnología para los propósitos productivos.
Con el propósito de superar estas falencias, el CPTS ha desarrollado y/o adecuado tecnologías en rubros en los cuales la tecnología existente en mercados convencionales no se adecúa al tamaño de nuestros emprendimientos o en aquellos en los cuales, definitivamente, no existe tecnología desarrollada. El desarrollo de tecnologías ha estado acompañado del diseño y aplicación de nuevos procedimientos y formas de gestionar la producción, y siempre bajo los principios de la PML.
Tecnología más limpia es aquella que, por su naturaleza o intrínsecamente, reduce los efluentes y la generación de otros residuos; maximiza la calidad del (los) producto(s); y optimiza el uso de materias primas, energía e insumos.
Las tecnologías más limpias pueden considerarse un subconjunto de las actividades de la Producción Más Limpia con énfasis en la mejora de los actuales procesos de fabricación o procedimientos de servicios considerando la integración de mejores sistemas de producción o de servicios a objeto de minimizar los impactos ambientales y maximizar la eficiencia de una o varias operaciones unitarias o de todo el proceso productivo.
Entre los años 2001 a 2004, el CPTS prestó asistencia técnica en PML a las siguientes cinco empresas dedicadas al beneficiado de la quinua:
Como resultado, además de recomendar medidas de PML para mejorar la eficiencia de las tecnologías utilizadas por estas empresas (en general, sus tecnologías eran muy similares entre si), el CPTS llegó a la conclusión de que dichas tecnologías tenían muy baja capacidad de procesamiento (era un cuello de botella muy serio para las exportaciones), además de que tenían serias limitaciones para poder mejorar sus eficiencias operativas (i.e. sus costos de operación eran altos, y la generación de residuos, sobre todo de saponinas, tenían impactos ambientales inaceptables).
En consecuencia, entre los años 2004 a 2006, dado el potencial económico de la quinua para el Altiplano boliviano, el CPTS decidió desarrollar nueva tecnología para el beneficiado de la quinua. Tanto la investigación como el diseño y la construcción de los prototipos de primera fase se realizaron en forma consecutiva (la empresa de metalmecánica CITY SRL fue la que apoyó al CPTS en la construcción de dichos prototipos), hasta que finalmente este proceso concluyó con el diseño y la construcción de los prototipos finales (también construidos por CITY), los cuales fueron instalados en forma experimental en la empresa Andean Valley SA (AVSA) para su validación.
Durante el proceso de validación, AVSA procesó 500 toneladas de quinua, y las mediciones operativas realizadas fueron la base para el diseño final de la línea de beneficiado comercial (la empresa autorizada para fabricar esta tecnología es CITY SRL).
Los componentes principales de esta línea de beneficiado, son: i) un sistema de limpieza por vía seca; ii) un sistema de limpieza por vía húmeda; y iii) un sistema de secado. Estos tres componentes están acompañados de equipos auxiliares, como ser silos, correas transportadoras, elevadores de cangilones, tolvas de carga, extractores de polvo y de humedad, ecualizadores de la presión de agua, sistema de suministro de GLP y/o GN, clasificadores granulométricos, envasadoras y otros. La capacidad de procesamiento de cada línea de beneficiado es de 2,500 toneladas por año.
En la Tabla 2 se compara las capacidades de beneficiado y las eficiencias entre las líneas de beneficiado antiguas (con tecnología tradicional) y la tecnología del CPTS construida en CITY.
Sobre esta base, y entre los años 2007 a 2010, se implementaron 7 líneas de beneficiado de quinua en las empresas señaladas en la Tabla 3.
La capacidad total instalada en las 7 empresas mencionadas en la Tabla 3 representa el 74% de la capacidad total instalada en Bolivia. Sin embargo, más del 80% de las exportaciones de quinua orgánica se procesan con la tecnología desarrollada por el CPTS y construida por CITY SRL.
En la Figura 1 se muestran dos gráficas correspondientes a la cantidad y al valor FOB de las exportaciones anuales de quinua orgánica durante el período 1999 a 2013 (datos INE-Bolivia). En esta Figura, nótese que el período 2001 a 2005 coincide con el período durante el cual el CPTS realizó los diagnósticos de PML en las principales empresas de beneficiado de quinua, y durante el cual las empresas de beneficiado implementaron recomendaciones de PML propuestas por el CPTS.
Nótese también que el período 2006 a 2011 coincide con el período durante el cual se construyeron e instalaron las 7 líneas de beneficiado mencionadas en la Tabla 3, y en la que las empresas más grandes incrementaron sus capacidades de beneficiado y exportación con la tecnología desarrollada por el CPTS.
Finalmente, el valor total de las exportaciones de quinua orgánica durante el año 2011 fue de US$ 63 millones, hecho que convierte a la quinua en uno de los más importantes productos agrícolas de exportación de Bolivia después de la soya. Es importante mencionar que esta tendencia continúa y se va acentuando cada vez más: para 2012, se reporta un valor en las exportaciones de $us 80 millones y, para el 2013, se estima que el país llegó a $us 135 millones. Más importante aún, es el hecho que aproximadamente el 66% del valor de las exportaciones de quinua orgánica (i.e. US$ 89 millones el año 2013) beneficiaron a los productores de quinua en forma directa, sin intermediarios.
Después de introducida la tecnología de PML para el beneficiado de quinua, el nuevo cuello de botella para las exportaciones resultó ser la producción agrícola de la quinua orgánica. Un problema central para incrementar la producción agrícola es que las tierras tradicionales, relativamente fértiles, son escasas en el Altiplano boliviano.
Para resolver este problema, el CPTS decidió investigar y desarrollar tecnología de PML para la producción agrícola de quinua en las abundantes tierras áridas que existen en el Altiplano boliviano, basándose en el hecho que la quinua es una halófita facultativa, altamente selectiva, donde la tierra puede ser utilizada simplemente como un sustrato inerte para las plantas, alas cuales se les agrega nutrientes orgánicos asimilables en cantidades suficientes y bajo ciertas características que permiten lograr los siguientes resultados específicos:
Estos resultados llevaron al CPTS al diseño de un modelo agrícola específico para tierras áridas del Altiplano. Este modelo agrícola no pretende convertir las tierras áridas en suelos fértiles; las tierras áridas, aunque productivas, permanecerán siempre áridas, pero ambientalmente protegidas, particularmente contra la erosión. La mejor garantía de que esto ocurra es, obviamente, el interés económico asociado a la producción masiva de la quinua en estas tierras áridas.
El componente físico del modelo desarrollado está constituido fundamentalmente por la Unidad Agrícola Productiva (UAP), la que a su vez está constituida por infraestructura, facilidades (i.e. pozo de agua de 50 m de profundidad, vivero forestal, y otras), maquinaria auxiliar y la siguiente tecnología agrícola que fue diseñada en base a resultados de 5 años de investigación, y construida a nivel de prototipos finales por CITY SRL:
Esta tecnología y el know-how agrícola desarrollados se encuentran actualmente en proceso de validación, a fin de proceder con la fabricación comercial de dicha tecnología. Un paquete tecnológico está diseñado para producir 250 toneladas de quinua orgánica por año, utilizando para ello 500 hectáreas de tierras áridas, con 250 ha en producción anual y las otras 250 ha bajo manejo (en preparación para el próximo ciclo agrícola). De cada bloque de 250 ha, solo 200 ha están sembradas con quinua, y 50 ha se destinan para áreas reforestadas, caminos internos de servicio, áreas de amortiguamiento y áreas de protección.
Para implementar su propuesta de un nuevo modelo productivo en tierras áridas del altiplano, el CPTS está promoviendo, además, un modelo de empresa plural para la producción de quinua orgánica en tierras áridas del Altiplano boliviano.
Para implementar su propuesta de un nuevo modelo productivo en tierras áridas del altiplano, el CPTS está promoviendo un modelo de empresa plural para la producción de quinua orgánica en tierras áridas del Altiplano boliviano. El modelo se basa en la constitución de una empresa plural—contemplada en la Constitución— de carácter comercial, conformada por varios socios: una comunidad que aporte tierra comunitaria, un inversionista (o financiador) que provea el capital de inversiones, una empresa beneficiadora que maneje la certificación orgánica y asegure el mercado, y el CPTS (con o sin participación societaria) que garantice la asistencia técnica necesaria realizando las transferencias tecnológicas del caso.
El modelo de empresa plural está basado en una forma colectiva de tenencia de la tierra —se refiere a tierras áridas del altiplano que no han sido parceladas—. Por ejemplo, la empresa plural podría estar constituida por:
La empresa plural se maneja a través de un Comité de Gestión que cuenta con una estructura organizativa, un reglamento interno y es responsable de la planificación, ejecución y evaluación participativa de la empresa.
El Comité de Gestión Plural está conformado por un representante de cada uno de los socios, y es equivalente al Directorio de una sociedad comercial. El Gerente de la UPI preferiblemente un ingeniero agrónomo, si bien dotado de las prerrogativas de gestión de toda gerencia, depende de los lineamientos de gestión establecidos por el Ejecutor.
Otro concepto importante que introduce este modelo productivo (ver recuadro correspondiente) son los “Gastos Socialmente Aceptables” (GSA). Se trata de una norma contable para la apropiación de gastos en la gestión de la UPI. Los GSA para la contabilidad de la empresa plural son todos aquellos gastos que tienen que ver estrictamente con la producción: combustible, estiércol, salarios, etc. Todos los demás gastos de ejecución de los socios de la empresa no son imputables al proyecto (gestión de la UPI) y corren por cuenta propia (tienen su contraparte en la respectiva participación en las utilidades del negocio plural).
El capital tangible aportado por el inversor se destina a las inversiones en infraestructura, maquinaria/equipos, insumos y capital de trabajo para gastos de operación. Para la escala de producción de una UPI, se estiman inversiones cercanas a los 7.5 millones de dólares. Si bien se han elaborado planes de negocios para inversiones programadas de 10 años, se estima que la tasa de retorno del capital tangible será elevada (cercana al 40%) por tratarse de un rubro con mercado en expansión.
El inversionista podría ser una empresa privada o también el Estado, en este último caso estaría cumpliendo su rol de correr riesgos por cuenta de la sociedad (si bien su principal rol sigue siendo el de garantizar la seguridad jurídica de los emprendimientos que sí arriesguen su capital). La beneficiadora puede ser una empresa privada o asociación de productores, lo importante es que tenga acceso al mercado. Al inicio el ejecutor puede ser el CPTS para garantizar la buena gestión de la UPI y la calidad técnica de la producción, mientras que al cabo del período programado de inversiones los activos podrían quedar en manos de la comunidad (salvo si se diera la decisión de renovar el negocio plural por parte de los socios).
La semilla del Achiote es la materia prima de la cual se obtiene la bixina y nor-bixina, colorantes naturales de alta demanda en la industria de alimentos, medicamentos y cosméticos. Los productores de distintas regiones del país (los Yungas, Chapare, Santa Cruz) comercializan dichas semillas a través de intermediarios encargados de su posterior exportación. Para el beneficiado de las cápsulas de achiote, los productores adaptan tecnología diseñada para el beneficiado de otros granos. Este hecho provoca bajos rendimientos y, por tanto, menores beneficios para los productores.
Por otra parte, al ser un producto de recolección del bosque, los productores no cuentan con las técnicas y procedimientos adecuados para el mejor manejo y cuidado del bosque natural de achiote. Este hecho redunda también en bajos rendimientos y pérdida de material.
El CPTS desarrolló las siguientes metodologías y tecnologías tanto para la producción primaria de semilla de Achiote, como para su cosecha y operaciones de post-cosecha:
La tecnología desarrollada por el CPTS ha sido probada en distintas asociaciones de productores de achiote en la región de Caranavi del Departamento de La Paz, habiéndose obtenido resultados muy importantes, especialmente en la reducción de pérdidas de material, y del personal necesario para las operaciones de trillado.
Un componente central de la asistencia técnica en PML que el CPTS presta al sector productivo consiste en examinar a fondo la tecnología y los procedimientos operativos empleados por cualquier emprendimiento productivo, a fin de identificar las causas que generan ineficiencias en el sistema productivo. Estas causas normalmente caen dentro de los siguientes tres casos y correspondientes respuestas:
Por increíble que parezca, en Bolivia existe un número significativo de actividades productivas que no cuentan con tecnologías adecuadas que permitan a sus usuarios proyectarse más allá del umbral de la subsistencia, debido simplemente a que los emprendimientos en cuestión no han tenido la capacidad de desarrollarlas; o porque las mismas no existen para la venta en el mercado nacional ni en el mercado internacional. Este fue el caso, por ejemplo, de la quinua y del achiote (ver Sección 6), los cuales carecían de tecnologías adecuadas para todos los eslabones de sus cadenas productivas (i.e. las tecnologías utilizadas hasta ese momento fueron adoptadas de otros procesos productivos, sin mayor adecuación, por lo que resultan muy ineficientes).
Para el desarrollo de una determinada tecnología, el CPTS realiza trabajos de investigación que se diseñan con fundamento en los principios de la PML. Un enfoque que ha dado resultados muy satisfactorios, es la recuperación de conocimientos artesanales/ancestrales, los cuales se examinan en términos científicos actuales para luego aplicarlos a las soluciones buscadas. De esta manera, los conocimientos artesanales/ancestrales son devueltos a sus usuarios en forma de tecnologías modernas de alta eficiencia (i.e. satisfacen los principios de la PML).
En este contexto, los servicios que el CPTS ofrece al sector productivo boliviano se desarrollan en torno a tres ejes de acción: a) la asistencia técnica en PML, incluyendo la capacitación; b) la investigación, desarrollo e implementación de tecnologías de PML; y c) la promoción e implementación de modelos productivos con un enfoque integral de ecosistemas para un desarrollo productivo, sostenible y participativo.